El origen de las alitas de pollo

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En las tres décadas las alitas de pollo se convirtieron en uno de los platillos favoritos al momento de ver deportes o televisión, compartir con amigos o simplemente por antojo.

Existe una gran variedad: con hueso y sin hueso, con piel o sin piel, empanizadas, al carbón, etc. Asimismo, podemos encontrar un abanico de sabores, desde agridulces, picantes, hasta las extremadamente picantes.

Actualmente las alitas de pollo son una de las botanas más populares del mundo. Es muy común encontrar lugares especializados en este platillo o su inclusión en los menús de las cadenas de restaurantes.

En Garfield’s contamos con tres versiones diferentes de las alias de pollo:  A la broaster, Picantes, y con aderezo BBQ. Todas vienen acompañadas de las salsas de la casa y papas fritas a la francesa.

¿Quieres saber de dónde surgieron?

 

Una historia con sabor

Previa a su creación en Estados Unidos, las alitas eran consideradas una comida nada apreciada pues eran partes del pollo que nadie quería.

Existen varias versiones sobre el origen de las alitas de pollo, pero todas indican que provienen de la ciudad de Búfalo, Nueva York.

Fueron elaboradas por primera vez en el Anchor Bar, ubicado en el 1047 Main Street (entre North Street y la Best Street) en  1964 por Teressa Belissimo, copropietaria del restaurante junto con su esposo Frank.

Una versión que a Belisimo  se le ocurrió freír alas de pollo y ponerlas con salsa picante ante una reunión sorpresa de su hijo Dominic y sus amigos. También sirvió tallos de apio con salsa de queso azul.

Otro origen, contado por Dominic, indica que su madre quería ofrecer alguna botana con carne para las personas que iban al lugar a tomas bebidas alcohólicas.

Una tercera posibilidad señala que un proveedor  entregó por error un pedido de alas en lugar de otras partes del pollo, pero que a Teresa se le ocurrió algo para preparar con ellas.

Hay una versión alternativa que señala a un hombre llamado John Young, quien se acredita el invento  en su restaurante John Young’s Wings ‘n Things a mediados de los 60.

Pese a que las alitas empezaron a popularizarse en Búfalo, la conquista de Estados Unidos y el resto del mundo llegó en los años 90, cuando el equipo local de fútbol americano los Buffalo Bills llegó al Super Bowl por cuatro años consecutivos.

Los medios hicieron varios reportajes en la región del equipo, incluida la comida local, y resaltaron las alitas de pollo, por lo que se convirtieron en la botana “oficial” para ver los partidos deportivos.

 

¿Cómo comer alitas de pollo sin ensuciarte la cara?

Siempre que se disfrutan las alitas de pollo es necesario ensuciarse los dedos, pero no hay porque mancharse el rostro. Vamos a explicar una manera de hacerlo.

01-  Hay que sujetar la parte de la alita que tiene dos huesos con los dedos.

02-  Hay que retorcerla adelante y atrás hasta que sintamos que la articulación se rompe.

03-  Se extrae el hueso pequeño

04-  El resto se lleva a la boca  por un extremo, no por el medio, se sujeta la carne con los dientes y se deja el hueso limpio.

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